Estamos permitiendo que así sea por haber entregado su gestión a manos de unos gestores que carecen de formación y de voluntad política y eso nos aboca a una situación de peligro de muerte. La lista de nefastas realidades así lo demuestra: la precaria situación laboral de los médicos, la expulsión y persecución de las terapias alternativas, la dudosa eficacia de los protocolos oficiales, los intereses comerciales, la invención de enfermedades, la especulación con los medicamentos, la falta de transparencia, el creciente aumento del gasto farmacéutico, las carencias, la situación económica,… Puesto que la Ley establece como prioritaria la protección de los consumidores y no su tutela, la obligación de los usuarios es impedir que sigan jugando con nuestras vidas.
Adrián Martínez, médico y miembro de la coordinadora estatal de “Recortes-Cero” ha hecho una disección de la situación en la que se encuentra el maloliente sistema sanitario español, en este imprescindible artículo ALGO HUELE EN EL SISTEMA SANITARIO