Desde que tomamos estevia, mi madre de 94 años y yo de 60, nuestra salud ha mejorado. Los índices de colesterol y azúcar están totalmente regularizados. No es posible entender que prohíban la estevia que es inocua y no el aspartamo que es cancerígeno. Nuestros gobernantes legislan en contra de los ciudadanos y a favor de las industrias farmacéuticas y esto resulta insoportable.