Mi nombre es Pilar, tengo 55 años (febrero 2021) y vivo en Huesca. Quería contar otra experiencia con el clorito de sodio (MMS).
La uña del dedo pulgar de mi mano derecha quedó afectada por unos hongos; casi la mitad de la uña estaba blanca y despegada de la piel. En un principio probé, durante unos cinco días, con el aceite del árbol del té; sin tener resultados notables. Fue entonces cuando se me ocurrió probar con el MMS de la manera siguiente:
Una gotita de clorito de sodio, más una gotita del activador, más dos o tres gotitas de agua; aplicada directamente en la uña afectada por el hongo, tres o cuatro veces al día.
En las primeras aplicaciones, ya comencé a notar mejoría y al cabo de cuatro o cinco días el hongo desapareció. Actualmente la uña está recuperando su aspecto normal y volviéndose a pegar a la carne.