Me llamo Ramón, tengo 51 años (enero 2017) y vivo en Lérida.
La historia de Mº Rosa, madre de un compañero de trabajo, de 49 años, (fumadora de paquete y medio de tabaco) empieza a finales de primavera de 2016. Tras varias semanas con tos persistente y dolor pectoral, acuden al médico.
18 de Junio: 1er TAC.
25 de Julio: Visita para conocer los resultados. Le dicen haber visto una mancha en el pulmón y le programan un PET-TAC con más definición.
29 de Julio: 2º PET-TAC. Le diagnostican un tumor de 22 mm en el pulmón. Le programan una broncoscopia y una biopsia para determinar si es maligno o no.
10 de Agosto: Le hacen la broncoscopia, pero como la mayoría de médicos estaban de vacaciones, ese día suspendieron la biopsia. La citan para comienzos de septiembre para hacerle la biopsia.
14 de Agosto: Ese día me cuentan la historia y, por la tarde, ya estábamos en la Dulce Revolución hablando con Josep Pàmies. La tranquilizó y esa misma noche empezó a tomar:
1 de Septiembre: Le hacen un 3er TAC para localizar el tumor y para biopsiarlo. Suspenden la biopsia porque el tumor había REDUCIDO A LA MITAD (de 22mm. a 11mm. Llevaba 16 días de tratamiento alternativo). La doctora no se explicaba la reducción y le preguntó si estaba tomando algún medicamento o algo complementario, cosa que ella negó. La citaron a principios de octubre para seguir la evolución.
5 de Octubre: Le hacen un 4º TAC.
24 de Octubre: Resultados EL TUMOR HA DESAPARECIDO “solo se ve una pequeña cicatriz”.
Hasta el día de hoy Mª Rosa está muy bien.